jueves, 28 de febrero de 2008

QUEDADA, QUEDADA¡¡

Apreciados amigos de las Verdes, Verdes en proyecto, futuros Verdes, mañana viernes habrá quedada. No es un día habitual - nuestra quedada suele en el domingo -, pero hemos decidido rotar algo los días, de vez en cuando, y como "precalentamiento" a lo que puede ser una agradable tarde noche de verdes, y hasta es posible que hasta de comics, de la mano de un gran aficionado a este género, Jesús Lens. ¿El lugar? ¿La hora?. Decidimos que sea en Puente Verde, junto al monolito que inicia el Camino de la Fuente de la Bicha, y la hora, propondría yo sobre las 17,15 si os parece bien. La ruta será la indicada y los kilómetros dependerá de quienes estén dispuestos a hacer más -tal vez quienes preparan maratón- y quienes menos. En mi caso particular no rodaré más de una hora en total para ir evolucionando en la recuperación, pero algunos probablemente deseen llegar hasta Pinos Genil, habrá para todos los gustos. ¿ Y el ritmo ? El ritmo -que a muchos preocupa-, será el espontáneo de cada uno, ya que al ser un camino de ida y vuelta no hay problemas de despiste, pérdida, y otros imponderables. Así pues, todos quedáis invitados a esta nueva cita.
Y ahora, si aún no lo habéis hecho, leer la cuarta entrega del Proyecto Florens, justo debajo de esta entrada, en esta ocasión sobre Yago Lamela. Y opinad sobre el artículo: queremos saber vuestra opinión. Nos vemos pues, pues ahora me voy raudo a Pinos Puente, no a correr, sino a la fiesta de la Peña de fútbol de mi Compae, que he sido invitado por el mismísimo Presidente. Órdenes superiores mandan.

YAGO LAMELA: SALTANDO EN NUESTRA IMAGINACIÓN




Hace algunos años surgió un atleta de nombre Yago, apellidado Lamela. Resulta que, en ocasiones, aparece alguien en alguna de las disciplinas deportivas que engancha al gran público, a ese público que no está conectado con lo deportes minoritarios y sólo conoce vida y obra de los deportistas consagrados. Pero a ese público de pronto le es popular un nombre, alguien que ha llevado a cabo una hazaña de explicación incierta; ese gran público nada sabe de la disciplina a la que se dedica, ni los record logrados, ni las medallas colgadas, no obstante, le conoce, le ha visto en televisión, en platós de programas de entrevistas de “prime time”, firmando autógrafos, en definitiva, formando parte del imaginario colectivo. Y es eso lo que pasó con Yago Lamela.
Para colmo este tipo cultivaba
una disciplina que muchos ni tan siquiera tenían idea que pudiera existir por estas latitudes. Es cierto que veíamos a fornidos atletas americanos saltando sobre un foso lleno de arena de playa, a atletas cubanos o jamaicanos, a atletas de la antigua Europa del Este, pero a un español, de Asturias para ser más exacto, no era algo que tuviera demasiado acomodo en la retina de ningún ciudadano español de a pie.

Pero el caso es que observando a ese joven de mirada intrépida, cuidada melena y aspecto de estrella del pop más empalagoso, no podíamos imaginar en él al subcampeón del mundo y recordman de Europa en Pista Cubierta y Campeón europeo sub-23, entre otros muchos logros internacionales. El caso es que se convirtió en un personaje mediático y todos saltábamos con él en nuestra imaginación. Y así, entre salto y salto pasó a convertirse uno de los mejores saltadores de longitud del mundo y todos hablaban de él: las cadenas generalistas y sensacionalistas, medios deportivos y no deportivos. Es decir, se produjo ese raro rasgo sociológico que hace que se eleve a la categoría de asunto de interés general un asunto que, por lo general, está muy reservado a minorías muy minoritarias, que aquí sí vale la redundancia.

Contábamos en España con excelentes maratonianos, caso de Martín Fiz y Abel Antón , que habían subido a los cajones olímpicos y mundiales; además, contábamos con aguerridos atletas de medio fondo, que antes de la generalización de los atletas africanos habían dominado los mil quinientos metros europeo y estaban en la elite del mundial de la distancia, caso de José Luís González, Abascal, Cacho, Estévez y últimamente Casado e Higüero; incluso, actualmente, contamos con uno de los mejores marchadores del mundo, el accitano Francisco Peláez, “Paquillo”, por no hablar de varias heroínas que destrozan a sus rivales blancas en pistas europeas tales como Marta Domínguez y Mayte Martínez, pero saltadores de longitud nada de nada, hasta que apareció ese, hasta ese momento, desconocido, joven asturiano, de Avilés, no dotado de esas largas y musculadas piernas de los grandes campeones de salto de longitud que todos retenemos en nuestra retina como es el caso de Bob Beamon, Carl Lewis o Iván Pedroso.

Al poco tiempo desapareció de la escena por culpa de las lesiones. Como mucho pudo llegar a a la final de salto de longitud de las Olimpiadas de Atenas en 2004, lugar en el que hubo de saltar con el pie anestesiado, pero antes de de las Olimpiadas Lamela había pasado un calvario de lesiones. Y es en esos momentos en los que comenzamos a reparar en el personaje, en el deportista, en la persona, hasta el punto que el propio Yago se interroga en un año de especial soledad, en 2005, “ Pasar más de un año cojeando no es algo que a un atleta de elite le haga pensar en positivo”. En esa amarga reflexión del atleta, de la persona, se encierra muchos años de sufrimiento deportivo y personal provocado por toda una sucesión de lesiones que comenzaron en la Golden League, en Bruselas. Además cambia el ciclo y se trunca una trayectoria que en lo crematístico – por lo mediática, por lo deportiva – iba viento en popa; además el personaje contaba con ese halo especial que le hacía atractivo para el gran público, las televisiones, el espectáculo, si bien todo eso dependía de sus saltos. Y siguieron más lesiones: en la rodilla, rotura de ligamentos de tobillo, talón de Aquiles, rotura fibrilar. No obstante, con todo ese cuadro se fue a la Olimpiada de Sydney en el año 2.000, quedando eliminado –como era presumible- en la fase de clasificación. Pero no era fácil para él creerse la situación por la que estaba atravesando. De hecho, su estrella mediática se fue apagando poco a poco y ya no era llamado por programas deportivos o no; su melena no era ya popular en los platós. Y es en esos momentos cuando el deportista, la persona debe de resurgir de los lugares más profundos, así que decidió buscar la soledad de las pistas y el entrenamiento en Valencia al año siguiente, en 2001, consiguiendo en tan sólo dos meses de entrenamiento proclamarse subcampeón de Europa Indoor. Es cierto, que no era competición ni categoría para el gran Yago pero no olvidemos que está saliendo del foso en esos momentos, ese foso en el que tantas veces y con tanto éxito había aterrizado al lado de ídolos de infancia como el cubano Iván Pedroso con el que subió en el cajón de medallas en el Campeonato del Mundo en Pista Cubierta de 1999 en Maebashi.

Cuando el nivel de lesiones se demostró preocupante Yago cogió su petate y se fue a ver a uno de los mayores especialistas, el finés Sakari Orave. Venía de los infiernos, pero con un meritorio 11 puesto en Atenas, donde saltó infiltrado. No era cualquiera el que se iba a Finlandia a que le operara uno de los mejores especialistas, era un tipo que había sido subcampeón mundial en pista cubierta, campeón de Europa sub-23 e incluso mejor marca del año en 2003, por no mencionar la infinidad de récord nacionales que poseía, inalterables desde el mítico Antonio Corgos.
A la vuelta, un bu
en día cogió el teléfono y habló con su entrenador de siempre. Debió pensar que había que centrarse de nuevo en esos orígenes que tanta gloria le habían aportado.

Ha vuelto para machacarse en las pistas, a no darse un respiro, a intentar ser el Yago que nos deslumbró a todos. Muchos lo habrán olvidado, otros nos hemos acordado de él, pero él jamás se olvidó de saltar. Ahora mientras entrena para llegar a ser el que era, aprende a pilotar helicópteros. Volvió a las pistas el pasado mes de septiembre y según opina él mismo no estará a punto para Pekín, pero si consideremos la trayectoria del personaje, su fuerza interior, su capacidad de lucha, su sana ambición, cualquiera sabe.

ANTONIO JESÚS FLORENS

martes, 26 de febrero de 2008

GALERIA FOTOS PRUEBA FONDO ALBOLOTE


De izquierda a derecha, en la primera fila: Abel y Paco;
en la fila de atrás de izquierda a derecha:
Javi, José Manuel, Antonio y José Antonio El humor se debe a una situación curiosa: justo enfrente nuestra estaban fotografiándonos María del Mar, Nuria y Ana, de manera que parecía una sesión de fotos en toda regla. Justo al lado se encontraba una cámara de la televisión de Albolote y ante tanta fotográfa y tanta solemnidad no dudó en grabarnos. Exclamamos que hasta allí era conocido el grupo de Las Verdes.



Ana, Maria del Mar y Nuria las tres excelentes fotógrafas que nos inmortalizaron. Si, hipotéticamente, alguna foto ha merecido la pena, sin duda el mérito es de ellas.



Victor, Antonio, Javi y Abel, cuatro agüerridos Verdes formando una especie de abánico. Si en la salida ya iban de esta forma, nos cuesta imaginar el ritmo a lo largo de la carrera.
Observe el lector atento la figura de Jesús Lens por atrás, con camiseta naranja, a rebufo del grupo, en brava actitud atlética.



José Manuel y Paco, dispuestos a comerse el mundo; al menos el municipio de Albolote. Es notorio que disfrutan corriendo.


El grupo con otros corredores, antes de la salida.



Quien este suscribe, en el kilómetro 5, feliz en el reencuentro con la competición, a la espera de tiempos mejores.



La llegada del primer Verde, Antonio, con una fuerza descomunal.



El grupo incrementado con ¿dos futuros Verdes?. Como puede observarse, Antonio totalmente atento a la cámara.




Nuria ¡ vigila eso abrazos de Aquiles a un mes y pico de entrar en capilla !



El tercer tiempo Verde. Paco, mi compae, en su línea amena y ocurrente, haciendo las delicias de todos nosotros. Todo un crack.

lunes, 25 de febrero de 2008

NUEVA ENTRADA AL PROYECTO FLORENS

....Y seguimos. Acaba de tener entrada el tercer trabajo del Proyecto Florens. Vá de fútbol. Vá de madridismo, por mucho que una pata del proyecto sea culé (que mezcla, que riqueza convivencial!!) no apasionado. Pero no pesa a la otra pata ese artículo porque obedece a una visión distinta, especial, y creo que de una calidad muy notable. Pero seguro que estaréis expectantes por leerlo, incluso, antes de la crónica de la prueba de Fondo de Albolote, que tenéis justo debajo de esta entrada.
Volver a recordar -aunque creo que ya no es necesario- que el Proyecto Florens, la criatura mitad humana, mitad literaria, está conformada por dos autores de blogs: éste relativo al mundo - a los mundos - del corredor y el blog hermano Pateando el mundo de mi Alter ego polifacético: escritor, articulista, corredor, baloncestista, cinéfilio, bibliófilo y gran conversador, Jesús Lens. Os dejo con LA MARCA DE LA CASA BLANCA.

XVI PRUEBA DE FONDO "CIUDAD DE ALBOLOTE" (24/2/2008)



JOSE MANUEL Y PACO (LAS VERDES) EN LOS PRIMEROS METROS DE LA PRUEBA (FRESCOS COMO LECHUGAS)

¿ Correr o no correr ? Casi como una duda metódica, fue la pregunta a resolver hasta unas horas antes de la celebración de esta prueba . Y es que el miedo a una hipotétic
a reproducción de la lesión siempre está presente en quienes corremos de forma habitual. Por su parte, existe el riesgo de perder la perspectiva de la competición, que siempre es negativo. De ahí que pensara que la más mínima sensación de mejora debería de traducirse en competir, así que qué mejor carrera que la de Albolote, no demasiada dura, no demasiado larga y, por lo general, atractiva y bien organizada. Así que tras el entrenamiento del jueves, en el que comprobé que el soleo no me transmitía molestia alguna la opción era clara: correr en Albolote. Además, tal y como comentaba a Francis Rodriguez Tovar esta mañana pensaba entrenar. Ahora bien, no es igual entrenar que competir. Me explico. El entrenamiento no conlleva presión alguna y no existe excitación en cuanto a marca, tiempos, competir con otros corredores, etc., en cambio en la competición el corredor se transforma: siempre va al tope que puede ir, así que acordándome de las palabras de mi quiromasajista ("No te aconsejo que compitas") busqué la fórmula perfecta que me permitiera competir como si fuera un entrenamiento más. Y creo que lo conseguí.


VICTOR "RETENIDO" POR LA ORGANIZACIÓN (TAL ERA SU VELOCIDAD)

El grupo de Las Verdes esta
ba prácticamente al completo: sólo faltó Mario. Y sabía que Antonio, Abel, Victor y Javí estarían intratables, así que en ningún momento decidí ir con ellos: hubiera sido un suicidio y seguramente una recaída; por su parte, estaba José Manuel y Paco, más tranquilos en su marcha y con los que planeé ir desde el principio: ese ritmo me iría muy bien. Y así fue durante los tres primeros kilómetros, festivos, sociales, parlanchines, jocosos, pero me acabé marchando antes de llegar al cuarto. No obstante, el marcharme no consistió en ningún tipo de transformación del entrenamiento -que era mi objetivo- a la competición, sino un proceso natural que no provocaba dolor alguno en el gran músculo que sostiene el gemelo. Además iba muy entero en cuanto al ritmo aeróbico, pero, claro, rodaba a 5 minutos el kilómetro y el recorrido no era excesivamente duro -pero tampoco totalmente llano-. Por su parte, Paco hoy no iba excesivamente bien, o al menos, no iba todo lo bien que corrió en Armilla.
Se podría decir que iba de menos a más (no de menos a mal) . Ese menos muy por encima de los 5 minutos el kiló
metro; y el más unos 10 segundos por debajo de los 5 minutos el kilómetro, si bien el tiempo final que nos atribuye la organización es bastante extraño; extraño e impreciso porque muchos de nosotros llegamos a cruzar la meta andando. Mala planificación sin duda.


JAVI PENSATIVO ¿ QUE TRAMARÁ AQUILES ? POR DELANTE MANU, COMPAÑERO DE CLUB

Sin embargo, eso no era lo importante para mí hoy. Importante era mantener la mente
fría y el corazón más que frío, gélido. Existen corredores que deciden no competir si saben que van a estar muy por debajo de sus posibilidades, pero eso es algo que conviven bien conmigo, ya que nosotros, los corredores, sabemos internamente cuando podemos y debemos dar más de nosotros y cuando no es posible o necesario. Una vez más, la paciencia es la mejor consejera. Y la confianza de saber que todo va bien y que pronto buscaremos mejores ritmos y apostaremos por más sufrimiento en las carreras venideras.
Por lo demás, ha sido una excelente mañana de atletismo, mañana que hemos compartido con muchos amigos y conocidos, compañeros del club....Particularmente han estado brillantes los miembros avanzados del grupo de Las Verdes, especialmente Antonio que ha corrido como una gacela a una media en torno a los 4 minutos el kilómetro, llegando a continuación, con estrechos márgenes Victor, Javi y Abel, al que felicito efusivamente por su debút (ya había ganas de verle debutar). Por su parte Paco y José Manuel siguen su curso progresivo, pacientes pero constantes. Asimismo, nuestro "nuevo Verde", Jesús Lens, que estuvo magnífico tanto en su concurso atlético como en su siempre aguda y atinada conversación, cuando todos los Verdes juntos, en compañia de Ana, María del Mar y Nuría, dimos buena cuenta de unas cuantas verdes en un mesón de la localidad alboloteña.
Pude cruzar saludos con numerosos miembros de nuestro club Esquí Atletismo Caja Rural: Alejandro, Bernardo, Fernando (a la espera de poner una contraseña al blog..), Manu, Ángel Luis, Antonio Castilla, Luis...y un largo etcétera; además siempre es agradable saludar a corredores de distinta procedencia como a Juan Antonio del club co-organizador de la carrera de hoy, a Juan Carlos de Construcciones Otero, y particularmente interesante fue la conversación con mi buen amigo Francis Rodriguez Tovar que siempre tiene dispuesto un consejo sobre lesiones, sobre alimentos, sobre estiramientos, un gran corredor dotado de una enorme generosidad. Echamos en falta a gente que estaba corriendo por las calles de Sevilla, caso de mi amigo José - Oliver - o compañeros de club como José Antonio Salazar. Por su parte, me alegró sobremanera saludar a miembros del club atletismo Armilla, organizadores de la charla del pasado 8 de febrero. Con Nacho, secretario del club, marché durante unos minutos; y particularmente agradable fue correr con Roberto hasta la meta, en los últimos kilómetros.
La organización ha sido correcta y muy precisa en cuanto a la no injerencia de coches, motos u otros vehículos en el circuito, pero ha sido estrepitosa la falta de previsión en cuanto al volumen tan alto de corredores que ha impedido que más de la mitad llegaran andando a meta. A un corredor le gusta siempre cruzar el arco de llegada y si no lo consigue por distintas causas, la frustración siempre aparece. Hoy la imposibilidad de llegar corriendo hasta la misma meta hay que considerarlo como un grave error de la organización, algo que es triste destacar en una prueba que suele ser de las mejor organizadas del Circuito. Sin embargo, sigue siendo ejemplar la sensibilidad a la hora de entregar una camiseta técnica, muy acertada en cuanto a diseño y color, en esta ocasión.
En síntesis, anotar la satisfacción por haber culminado otra carrera y por el dato objetivo de tener más que fundadas sospechas de que la lesión remite, al parecer, ya de manera definitiva. Por tanto, volvamos a la ruta con más ganas que nunca. Espero que la semana sea prolija en entrenamientos y sensaciones.

sábado, 23 de febrero de 2008

MAÑANA, SEGUNDA CITA DEL CIRCUITO EN ALBOLOTE


Al parecer, mañana a las 11 horas en Albolote correremos entre agua. Pero como decía en los comentarios de la entrada anterior, las carreras de fondo no suelen ser demasiado sensibles a la lluvía y demás condiciones atmosféricas, así que a no ser que el Arca de Noé circule a sus anchas por las calles nada impedirá que corramos.
Esta carrera suele ser de las mejo
res organizadas del Circuio, con salida y llegada en el coqueto Campo de Fútbol Municipal, dotado de una pista de atletismo muy cuidada y a la que habrá que dar casi una vuelta entera para llegar a meta. Suele ser una de las carreras menos duras, si bien la dureza siempre la negocia el corredor.




INICIO DE LA PRUEBA EL AÑO PASADO

Normálmente siempre hay algunos metros más de los 10.000 que jura y perjura la organización, algo bastante habitual en nuestro Circuito Provincial y totalmente incomprensible en la era del GPS, pero en fín, ese hecho no desmerece la prueba, que es totalmente urbana y cuenta con una llegada algo picada, pero nada de importancia. En definitiva, un buen día para hacer marca y/o disfrutar de la cita atlética, que podría reunir en esta ocasión, según reza el diario Ideal, más de 700 atletas venidos de toda la provincial y de otros lugares de Andalucía.

En cuanto a mi participación, he estado valorando seriamente no correr esta prueba; de hecho el quiromasajista que me atienda me aconsejo no correr porque las endorfinas en competición se disparán y siempre queremos y podemos ir más rápido que en un entrenamiento de similares características kilométricas. Es más, tampoco confíaba en mi recuperación. Pero eso fue hasta el pasado jueves, día en el que entrené durante nueve kilómetros, por un terreno mucho más roto que el de Albolote y las sensaciones fueron excelentes, pero eso sí a cinco minutos y diez segunos de media, por lo que corriendo a esa velocidad aproximada, estaría garantizada la continuación de la recuperación, si bien no lo estaría tanto ir a un ritmo superior. Ese es el planteamiento teórico, que debe ser también el práctico. De lo contrario, mejor no correr hasta Loja a finales de marzo.

En cuanto a régimen interno, amigos de Las Verdes, sé que la mayoría de vosotros jamás ha corrido esta prueba y, lógicamente, tendréis alguna duda logística. Como os decía en un comentario, no existe problema en cuanto a la ubicación de lugar y a aparcamiento, ya que ambas cosas son muy accesibles. Para llegar, lo mejor es acceder desde la autovía, de manera que el Campo de Fútbol se encuentra justo a la derecha, una vez se baja el puente que atraviesa la autovía y da acceso a la localidad. Muy fácil. En cuanto a aparcamiento no hay problema porque se utiliza todo el terreno asfaltado del ferial.
Comentaba Abel que las 10. Un buen lugar podría ser el kiosko de bebidas que hay un poco antes de acceder al recinto deportivo.

Pero si lloviera ¿ Cómo vestir ? Realmene no lo sé, ya que normalmente sabemos como vestirnos para entrenar - chubaquero, malla...-, pero no es tan fácil para competir, ya que mucha ropa no es apeticible y la camiseta de tirantes - en el caso de los que estamos en un club-, podría ser insuficiente Me atravería, por tanto, a aconsejar un chubasquero técnico, que permita incorporar el dorsal, y si la lluvia no es intensa, podría bastar con la camiseta habitual. Si no hace frío en exceso, tampoco es aconsejable malla alguna, ya que las piernas no suelen ser demasiado críticas con la lluvía, pero eso sí, siempre es aconsejable unas zapatillas técnicas que resbalen poco y posean una malla no demasiao calada.
Por lo demas, de acuerdo con los que deciáis en los comentarios: poco gintonic, buena pasta y mucho descanso, ya que son carreras cortas, y por lo tanto, rápidas.

Por último, desear mucha suerte y buenas sensaciones a quienes ya seguramente estáis en Sevilla para afrontar la Maratón de la capital hispalensa. Esta iba a ser la Maratón que correría este año, pero por lo que todos sabéis, no ha podido ser; así que correrla por mí y mis mejores deseos. Suerte a Paco Montoro, a mi amigo Jose - al que tengo que llamar-; a compañeros de mi club, caso de Fernando Medina, Manu y José Antonio Salazar, entre otros, que tenían previsto participar; a gente del Club de Albolote como Juan Antonio, a Javi, asiduo al circuito y lector de este blog. En definitiva a todos los valientes que se atreverán con los 42 kilómetros y pico, probablemente pasados por agua. Ya nos contaréis cómo ha ido.

jueves, 21 de febrero de 2008

CORRIENDO BAJO UNA LLUVIA MELOSA


Aún con cierto miedo, esta tarde me he reencontrado con el correr como no había ocurrido desde hacía mucho tiempo.
Una lluvía melosa, una clima
tología agradable, una ausencia total de viento y una naturaleza repleta de matices, han hecho que el correr haya sido delicioso.
Parti
endo desde Caparacena he avanzado hasta Pinos Puente, accediendo de nuevo hasta la deliciosa aldea, que inspiró el relato navideño, por un singular camino que surca entre olivos. En todo momento ha habido amenaza de lluvía, pero ésta apareció plácida y discreta, sin apenas denotar sus presencia, sin molestar apenas.
Pero todas esas sensaciones eran posibles porque el argumento principal que provocaba ese miedo que anunciaba se fue diluyendo, a medida que daba acolchonados pasos con las excelentes Asics 2100, y el dolor en el
soleo no existía. Es entonces cuando todo era perfecto: la naturaleza, la sierra repleta de un verdor negruzco a la izquierda, elevándose desde el rio, los olivos serpenteantes y elevados a la derecha y la melosa lluvía callendo sobre la cabeza, delicadamente, como no queriendo que se percibiera su presencia. De esa manera han sido devorados algo más de nuevo kilómetros a un ritmo muy prudente de 5'10'' aproximadamente.


Para acompañar a toda esa conjunción de sentidos sabía que nada iría mejor que el albúm Lemuria (supuesto continente que precedió a la Atlántida), un albúm -que posee un albúm gemelo: Sirius B- muy identificativo de la banda sueca Therion, dotado de coros femeninos y masculinos de corte místico medieval, sin renunciar a ritmos roqueros con clara vocación Heavy Metal sinfónico con connotaciones también clásicas. Y, claro, toda esa mezcla ha sido impresionante.
Y sentía como iban cundiendo los kilómetros, a pesar de que la velocidad de crucero no era excesiva, pero sí constante y estable. Ha sido todo un reencuentro que ofrece muy buenas sensaciones para el futuro, si bien aún tiene que ser ponderada la prudencia. De hecho, aún me consumo en la duda sobre cómo proceder en la carrera del próximo domingo. Mi quiromasajista me aconsejó hace un par de días, por teléfono, que no debería de competir. Opina con razón que las endorfinas están mucho más descontroladas en competición y que la tendencia es dejarse ir por el ritmo que puedas adoptar, sin preocuparte de lesiones u otros problemas; que es muy difícil mantener la mente fría; que esta mente fría sólo es posible mantenerla en el entrenamiento. Y razón no le falta: competir por debajo de tus posibilidades reales es muy, muy difícil, porque una mano invisible te lleva a tu ritmo natural de competición.
En lugar de la competición de Albolote podría llevar a cabo un plácido entrenamiento de 15 kilómetros por la Vega el sábado por la tarde, sin descontrol de endorfinas, a un ritmo pausado, sin onerosidad alguna. Por su parte, Paco - Compae- me anima a que vayamos juntos y me lo tome con mucha tranquilidad. Además, es posible que haya pleno del grupo de Las Verdes ¿ Qué hacer ?

MÚSICA PARA CORRER, MÚSICA PARA VIVIR



Hoy este blog, esta entrada, se ha vuelto básicamente músical.
Hace unos días relacioné a la derecha una serie de grupos e interpretes que me suelen acompañar, sobre todo, en mis tiradas largas, donde la soledad del corredor de fondo se enerva de manera irremediable.



En este amplio universo de corredores, cada cual es un mundo, si no una constelación. Corredores hay que detestan la música para correr, pero otros escuchan hasta
noticias. En mi caso particular, inicialmente, no comprendía que se pudiera correr escuchando música; tal vez influía notablemente que no conocía de aparatos fácilmente transportables que no dificultaran lo más mínimo la tarea física y mental que supone correr. Pero surgieron esos aparatos fáciles de llevar, por medio de brazalete o en bolsillo, dotados de un peso insignificante y provistos de auriculares perfectamente adaptables al pabellón auditivo. A todo ello contribuyó la movilidad ciudadana y, por supuesto, el cada vez más creciente número de personas que deseaban escuchar música mientras corrían. Así que como uno es curioso, caprichoso y experimental, un buen día me hice de un IPOD NANO de 1 GB, de un brazalete y de una funda de silicona para el aparato, estas dos últimas cosas a través de Ebay, y desde entonces han sido muchas las horas en las que he disfrutado de dos de las cosas que más me agradan: correr y escuchar música, "mi música".


Pero claro, lo que para mí es vital desde el punto de vista músical para otros no es ni siquiera importante y viceversa. De hecho, no suelo llevar cualquier música para correr: tiene que ser una música que ya de por sí me estimule sobremanera. Y hay mucha, prueba de ello es esa larga lista de la derecha.


Inicialmente esa lista era pacata porque se leía el nombre de grupo, intérpretes, etc., pero nada más se podía hacer, así que me he dedicado un buen rato a buscarle un enlace interesante a cada grupo o intérprete. Y he optado por el directo, que suele ser lo más espectácular musicalmente hablando, algo que comprobé en un periodo de mi vida y que sirvió para ver en directo a muchos de los grupos que hay en esa relación. Desde entonces me enganché a ellos y sigo experimentando y escuchando más grupos, para lo cual me será de gran ayuda Javi del grupo Las Verdes, aficionado también al Heavy Metal. No osbtante sería ingrato si no dijera aquí que debo todo ese conocimiento modesto de estos grupos -la mayoría extranjeros- a Pepe López y Juanito, amigos ambos de Pinos Puente que fueron decisivos en la programación de las primeras ediciones del Piorno Rock.
Hay de todo y os aconsejaría que vieráis los máximos posibles porque estoy seguro que a quiénes no conocéis nada de estos grupos, algo os transmitirán.
La mayoría pertenecen al llamado Heavy Metal Gótico, pero existen también míticos representantes del Metal clásico, como Metallica y precursores góticos como Jetrho Tull, sin olvidar piezas geniales de la música clásica que más me estimula (con la Sinfonía Fantástica de Berlioz a la cabeza) y un grupo mítico del POP internacional, tal vez uno de los grupos del POP más exquisito, con cierta inclinación hacia el rock suave en algunos temas: Supertramp, interpretando en Münich en 1983 su mítico "School" pertenenciente al albúm inolvidable "Crime of the century". Ya digo, todo es particularmente interesante, pero no os perdáis -por su particularidad- vídeos como los de Haddgar, Therion, In Extremo o After Forever, por citar unos pocos. Particularmente sugestivo es el tema "The bards song" del grup alemán Blind Guardian, el Guardián ciego. Existe la posibilidad de escuchar los temas sin que necesariamente se esté visionando el vídeo, mientras se leen las entradas o se hace cualquier otra cosa en el ordenador. Asimismo, es posible ver el vídeo a pantalla completa pinchando en el margen inferior derecho del mismo. Espero que disfrutéis de esta música y estos vídeos tanto como yo. Y por supuesto, admito sugerencias de nuevos grupos e intérpretes.

miércoles, 20 de febrero de 2008

NUESTRO PROYECTO FLORENS SOBRE EL PAPEL

Ayer, Jesús Lens y yo, intercambíabamos ideas sobre nuestro proyecto, ideas de futuro, de papel y otros asuntos, porque este proyecto quiere tener largo recorrido y asentarse, si bien como dice el buen Jesús, este tipo de proyectos largos deben de ir poco a poco.
Esta mañana la entrada inicial del proyecto, la dedicada al gran GEB ha visto la luz en papel. Ha sido en el Diario Ideal, por lo que estamos contentos que el papel sea testigo de este proyecto y, suponemos, seguirá siéndolo en el futuro.

REINVENTARSE


He vuelto a los caminos, pero siempre está presente la duda de si habrá o no continuidad. En ocasiones la inseguridad es psicológica, pero casi siempre es el lado físico el que te detiene. Pero has de volver a intentarlo.
El pasado domingo seguí fielmente los preceptos indicados tanto por Medicina deportiva como por quiromasajista y el resultado fue el que ellos esperaban: nada de dolor a cambio de que no existiera abuso en el kilometraje ni en el ritmo. Y es a partir de ahí cuando hay que reinventarse como corredor, y algo también como persona. Acostumbrado como estás a hacer de tu vida un vasto territorio cargado de kilómetros; adiestrado a comenzar a sentir el kilometraje en tus piernas a partir de los 15 kilómetros, sino más; habituado a calzar las zapatillas y devorar caminos, carreteras y calles, trás una lesión necesitas reinventarte, que es una misión más propia de la mente que del físico, porque la materia gris siempre es más vulnerable al olvido que el físico.
Para muchos corredores ese ejercicio es tremendamente duro porque en ocasiones lo atesorado a lo largo de días de entrenamiento y carrera puede perderse en muy poco tiempo, jugando la confianza un papel importante en esa transmutación. Además, el reencuentro con los caminos no suele ser tan fácil como pareciera y no basta con "tirarse" a la calle y seguir corriendo. Si fuera fácil habría bastante menos respeto hacia las lesiones.
La dificultad estriba en volver a sentirse corredor, sabedor que, en principio, no será posible devorar kilómetros y kilómetros como un mes o dos meses antes; Es algo paulatino; algo similar a lo que pudiera sentir el preso recién salido de la cárcel que opta por no beberse todo el cielo estrellado en su primer contacto con la libertad. Es aproximado a lo que sentí el pasado domingo cuando hacia 6 kilómetros con Emilio: con llegar sin molestías ya era suficiente ¿Podría ser esa la definición de la paciencia?
Partícularmente, en ese mes aproximado de parón no he sentido la zozobra y angustía que otros corredores lesionados advierten, tal vez porque no he estado totalmente desconectado de este mundo: actualizar el blog me lleva tiempo y también me sumergí de manera abundante en este mundo al preparar la charla de hace unos días; además "debuté" de alguna manera en la primera prueba del Circuito, asistiendo a la carrera para acompañar a los compañeros y de camino hacer unas fotos, y jamás he faltado a una cita dominical con el grupo de Las Verdes, incluso, en la ocasión en la que no pude correr, acudí con Paco a tomar unas cuantas verdes.
Y ahora ya estoy de nuevo en los caminos con la duda de no saber qué pasará cuando aumente el volumen kilométrico, pero con las ganas de correr recobradas y la ilusión intacta. Anhelando correr entre choperas, acequías y naturaleza viva.

martes, 19 de febrero de 2008

TERAPIAS DEL CORREDOR

Esta mañana recibía una llamada de José del Oliver para tomar un café. Y hablamos de política, de libros y, por supuesto, de correr.
José - lo he dicho aquí en a
lguna ocasión - es probablemente uno de los corredores más concienzudos que he conocido, que unido a sus cualidades innatas para correr, le ha situado entre los mejores del fondo granadino, que es algo muy meritorio sobre todo si tenemos en cuenta que Granada cuenta con muy buen nivel en esta especialidad atlética.


Correr en grupo es un buen antídoto de motivación

Sentados en una cafetería de Gran Vía, me preguntaba sobre el estado de mi lesión y le decía que había recuperado las ganas de correr y que, a fin de cuentas, no me ha venido mal la lesión -que no ha sido grave- dado que, incluso, antes de la lesión en la Media Maratón de Los Palacios me encontraba algo cansado y me costaba salir a entrenar.


Pertenecer a un club es perfecto para compartir afición

Porque resulta que los corredores, por mucha afición, ilusión, ganas, dedicación y convicción que tengamos hacia lo que hacemos, atravesamos en ocasiones momentos de hastío y cansancio ante la actividad continuada de correr. Tardes hay en las que planificar el entrenamiento se convierte en algo oneroso, si bien ya una vez en ruta solemos olvidar con facilidad el momento inicial de arranque.
Tal y como dije en un momento de la charla de Armilla, es muy distinto planificar la agenda semanal de e
ntrenamientos que ejecutar éstos y llevarlos a cabo de una manera más o menos solvente. Sobre el papel es fácil, pero no tanto llevarlo a la práctica ya que hay que contar con muchos imponderables: tiempo, motivación, climatología, estado físico, mental, y un largo ectcétera. Ahora bien, es cierto que es algo que el corredor avanzado ha superar casi con la misma eficacia que un corredor profesional u amateur. De hecho, no es posible ser corredor si arrastramos a diario todos esos inconvenientes.


Nada más estimulane que tus amigos de siempre corran.

Para frenar tod
os esos estados obtruccionistas, el corredor que desea serlo por encima de otras cosas, debe de aprender pronto que esas circunstancias paralizantes, que podrían dar al traste con su entrenamiento, deben ser asumidas como algo natural y no sobrevenido, acostumbrarse a convivir con todas incertidumbres, indecisiones e incluso miedos. Para ello, siempre es muy conveniente contar con recursos creativos que sustituyan los pensamientos negativos ante el entrenamiento. A modo de decálogo podríamos indicar, entre otros, los siguientes:

- Elegir nuevas rutas que provoquen nuevas sensaciones.
- Correr por lugares que nos estimulen particularmente.
- Salir en grupo, algo muy aconsejable para no caer en la inanidad del corredor de fondo.
- Planificar nuevas carreras cada temporada.
- Plantearse objetivos novedosos.
- Enrolarse en un club.
- Comprobar que se alcanza poco a poco el nivel deseado.
- Ilusionarse con nuevo material técnico que estimule.
- Compartir la afición con los amigos más cercanos.
- Comprobar que perdemos el peso deseado o que nos afinamos adecuadamente.

Podríamos hacer la lista interminable, tan interminable como son las posibilidades que brinda este deporte. Por tanto el correr y la imaginación han de ir de la mano.

domingo, 17 de febrero de 2008

VUELTA A LOS CAMINOS


El "vuelvo a los caminos" que se ilustra en el margen derecho de este blog, se ha convertido en realidad esta mañana en la quedada organizada con el grupo de Las Verdes (un grupo muy nutrido por cierto); y animados como íbamos, charlando en camarillas, todos con todos y todos entre todos, no reparé si reaparecería el dolor hasta pasado el primer kilómetro de esa miniruta que Emilio y yo hemos hecho de seis kilómetros, mientras el grupo mayoritario se alejaba y perdía entre el verdor ventoso de la Vega inmaculada de polución y construcciones salvajes.
Por tanto hay que estar de enhorabuena, sobre todo tras comprobar que el dolor en el soleo izquierdo no ha reaparecido en ningún momento. Pero he mantenido la cabeza fría, y seguramente eso habrán pensado mis compañeros de ruta, cuando transcurridos apenas tres kilómetros, con un ambiente fenomenal y todo el mundo parlachín y vital, decidimos Emilio y yo doblar a la izquierda, rodear el Cortijo de Alitaje y volver sobre nuestros pies hasta la Cruz de Granada de nuevo. Pero me ha costado; es decir, nos ha costado a ambos "divorciarnos" del grupo, sobre todo cuando vas completamente entero, el dolor no existe y tan sólo la cabeza manda. Es lo que procedía y lo que había que hacer. Cuando le comentaba a Emilio que en el próximo cruce doblaríamos a la izquierda no advertí en él mucho ánimo de volver porque su rodilla hasta ese momento estaba perfectamente y porque había ganas de correr. Pero, ya digo, mantuvimos la mente fría -algo tremendamente difícil cuando el corazón está caliente- , ante las protestas jocosas de Paco y sus clásicas bromas que tanto gustan y animan al grupo.
Yo, como decía, seguía bien en dirección a Pinos Puente. Muy bien, diría yo, a pesar del fuerte viento que en ocasiones, cuando íbamos en dirección norte, llegó a frenarnos por completo; en cambio el dolor en la rodilla de Emilio comenzó a aparecer justo en el Cortijo de Alitaje, si bien no hasta el punto de tener que detenerse. En su caso procederá descanso y bicicleta para reforzar y en el mío incremento progresivo de kilómetros hasta alcanzar la plenitud total.

Y el grupo de Las Verdes siguió. Según comentaron, pronto comenzaron las hostilidades que, en esta ocasión, no han sido provocadas por el hostigador del reino, Abel, sino por otro miembro del grupo que hasta el momento teníamos por más discreto y comedido: Javi. Pero interesante sería que ellos mismos nos lo comentaran de forma amplía y precisa para que sus narraciones ocupen el espacio que no ocuparán en esta ocasión las fotografías. Bastante ha tenido Nuria con activar los pedales de la bicicleta ante la vehemencia del viento como para repartir su energía haciendo fotografías. Un día verdaderamente desabrido.
El grupo de Las Verdes, decía, hoy ha estado concurrido, pero también ha habido una ausencia. Ha estado conformado por Paco, José Manuel, Mario, Javi, Abel, Antonio y quien esto suscribe, entre los habituales; y hemos disfrutado de la compañia de Mariano, amigo de Mario y al que conocía de algunas carreras y Emilio. Por tanto, nos ha faltado un miembro (que será objeto de una encuesta en el margen derecha).
Tras la larga sesión de 18 kilómetros aproximádos fueron llegando todos los miembros, con poco tiempo entre unos y otros - si bien algunos han alargado un poco la ruta-, procediendo ese sabroso tercer tiempo verde, en el que nos hemos sumergido en cuestiones varias, presidiendo hoy la conversación el asunto político en el que nos sumergerán a todos los españoles en los próximos días, concluyendo que estamos todos - de distintas ideologías- en una gran duda ante quién votar el próximo 9-M o si, sencillamente, merece la pena ir a votar ante el sombrío panorama con el que nos están obsequiando los partidos políticos. Pero, antes tiempo hubo del reparto de camisetas, pantalones y muestra de calcentín técnico que portaba en una gran bolsa Abel, nuestro partícular y voluntarioso -agradecidos estamos- proveedor deportivo.
Y no quiero cerrar esta entrada sin destacar la mejora que está experimentando mi Compae - nuestro Compae -, al que cada día se le ve más motivado y mejor, por lo que veo una mano invisible de Meli ayudándole a enclaustrar para siempre la despensa.

SEGUNDA ENTREGA DE FLORENS PROJECT DEDICADA A PAU GASOL


Amigos, como dijímos este proyecto Florens ha visto la luz con vocación de larga vida, de manera que en poco tiempo ya ha tenido dos gestaciones escritas a cuatro manos por dos blogs hermanos: éste y Pateando el mundo, de Jesús Lens. Esta última entrega está dedicada al más grande de los baloncestistas españoles, un señor del baloncesto, un jugador educado, simpático y merecedor de todo esa arrolladora carrera que tanto ha trabajado y que le ha hecho recalar en el grande de los grandes LA LAKERS. Por supuesto, hablamos de Pau Gasol.
Con el título Fin de ciclo. Parte I: Paul Gasol

que podéis leer y disfrutar directamente en el blog hermano, os ofrecemos una visión deportiva, empresarial, humana y vital del largo camino que ha debido andar nuestro jugador más internacional para acabar en la élite del baloncesto mundial. Y todo ello escrito con una prosa deliciosa. La disfrutaréis, sin duda.

ANTONIO JESÚS FLORENS


sábado, 16 de febrero de 2008

¡¡¡QUEDADA, QUEDADA!!! (COMO DIRÍA ANTONIO)

AMIGOS: UN INCISO, SIN ÁNIMO DE INTERRUMPIR LA ATENTA LECTURA DE LOS DOS NUEVOS LIBROS QUE PROPONGO.
MAÑANA DOMINGO A LAS 11 DE LA MAÑANA EN LA PUERTA DEL RESTAURANTE LA CRUZ DE GRANADA DE PINOS PUENTE, HABRÁ QUEDADA DEL GRUPO DE LAS VERDES -TAN AMPLIO COMO QUERÁIS- PARA HACER UNA TIRADA AMORFA, ES DECIR, UNOS HARÁN MÁS KILÓMETROS, OTROS HAREMOS MENOS, PERO ESO SÍ, SALDREMOS TODOS JUNTOS. ES PROBABLE QUE LLUEVA, PERO A NO SER QUE LA LLUVIA SEA TORRENCIAL YA NO AFECTARÁ AL CAMINO, PERO SI AFECTARA BUSCAMOS UNA RUTA ASFÁLTICA. NO OBSTANTE, ES MEJOR IR DOTADO DE CHUBASQUERO Y ZAPAS QUE NO RESBALEN EN EXCESO. HALA¡ YA PODÉIS SEGUIR CON LA LECTURA LITERARIA. HASTA MAÑANA, PUES

viernes, 15 de febrero de 2008

UN MUNDO SIN FÍN (CONTINUACIÓN DE LOS PILARES DE LA TIERRA)





Nunca he tenido demasiado interés por esos libros catalogados como "best seller". Acostumbrado a gozar de un libre albedrío a la hora de llevar a cabo el rito de buscar, seleccionar y leer el libro más adecuado para el momeno, jamás me ha seducido la idea de que nadie lo haga por mí. Siempre he admitido un buen consejo, de alguien que te inspira confianza lectora, a la hora de leer un libro; es más , creo que la fuente primaria de nuestras lecturas suelen ser los buenos consejos o críticas literarias de personas, revistas o programas dedicados a los libros, que es algo muy distinto de catalogar un libro como "best seller", que además, siempre me ha sonado a literatura de baja calidad, literatura de consumo para leer en una estación de autobús o de tren, sin otras pretensiones que entretener.


Pero era verano, me fue regalado el libro en la edición de bolsillo, me habló bien de él una persona de mi confianza y abrazaba la Edad Media - en pleno siglo XII -, tal vez, la etapa histórica más oscura y enigmática por la que ha atravesado el ser humano.




Además, su temática principal giraba en torno a un asunto que siempre me ha interesado sobremanera: la construcción de una catedral medieval, de tipo gótico, por lo que me dije que tantos millones de personas en el mundo no podían estar equivocadas, al tiempo que no tenía constancia de críticas furibundas en torno a este libro y a su autor Ken Follett. Así que aprovechando las noches del estío me sumergí en "Los Pilares de la Tierra", un libro que supera las mil trescientas páginas. Y a través de él me sumergí en la desdichada vida del maestro constructor de catedrales Tom y su azarosa familia, testigos generacionales del nacimiento de la catedral, el religioso bondadoso versus religioso malvado, el Conde avinagrado dispuesto a seguir disfrutando de sus privilegios incluído el "derecho de pernada" una ¿institución? jurídica que existió largo tiempo, demastrando que en más ocasiones de las debidas el derecho, la moral y la ética no siempre van unidos; y todo ello bajo el tapiz de una inmensa, gloriosa, excelente y única catedral, descomunal para un pequeño lugar como es Kingsbridge (que podríamos traducir como Puente de los Reyes. Curiosamente cuando leía esta novela pensé si Ken Follett no se inspiraría en la majestuosa Puente de la Reina -Navarra- para crear esa población ficticia, si bien existe una ciudad con la misma denominación en Inglaterra). Y disfruté de esa lectura. Con ella aprendía a ver las catedrales de otra manera; había visto las mejores catedrales españolas: la vieja de Salamanca, la de Ávila, la de Burgos, la de León, la de Vitoria...., algunas de ellas antes de leer la novela de Follett y otras trás leerla, y no podía mirarlas con la misma mirada desde que "aprendí" cómo se construye una catedral, cómo se elaboran sus mosaicos y vidrieras, el significado de la forma de sus naves...sus pilares.



Así que el otro día pasaba por una librería y observé el voluminoso libro "Un mundo sin fín", la denominada continuación de "Los Pilares de la Tierra" y a pesar de su voluminosidad, de su precio, de que ahora no disponía de demasiado tiempo para leerlo, no pude resistirme y lo adquirí, negándome a esperar a su publicación en tamaño bolsillo (que supone una ironía para libros de más de mil páginas). Sabía de este nuevo volumen que el autor inglés se había inspirado en la catedral gótica de Vitoria, concretamente, en su proceso de restauración, pudiendo asistir como testigo excepcional a dicho proceso, que le permitió atisbar y anotar los pilares de la catedral y otros elementos arquitectónicos que serán enterrados para siempre al acabar la restauración. Años atrás pude ver la Catedral de Santa María, de Vitoria, si bien no con la plenitud que hubiéramos deseado Mati y yo, debido al inicio de su restauración. Por tanto, no podía dejar más que sumergirme en la nueva entrega de Los Pilares de la Tierra, porque honestamente, al acabar su lectura comprendí que se trataba de una historia bien contada y la literatura estaba presente en sus páginas. Espero que su continuación siga la misma línea.

miércoles, 13 de febrero de 2008

GEB: NACIDO PARA CORRER




El padre de Haile no creyó en su hijo hasta 1993, que fue precisamente el año que venció en el campeonato del mundo absoluto en 10.000 m. si bien para entonces ya había conseguido ser campeón del mundo sub-21 en 5.000 m. y 10.000 m. Seguramente su progenitor acostumbrado a tutearse con la paciencia como buen granjero de los vastos territorios naturales etíopes, ya adivinaba que su hijo varón no descansaría de patear esas mismas praderas africanas donde dicen que el cielo se confunde con el horizonte. Pero también sabía que no podía creer en su hijo como corredor por el sólo hecho que corriera como las gacelas cuando cientos de chicos de su edad también lo hacían por aquellas tierras africanas, y no siempre por placer; así que acostumbrado a comprobar que nada es singular sin esfuerzo, decidió empezar a creer en su hijo tan sólo cuando dejara atrás esas praderas y comenzara a correr de verdad a lo largo y ancho del mundo.

Y comenzó a correr como su padre barruntaba. Corrió por todo el mundo, sin encontrarse apenas rivales, ni siquiera de su mismo color, batiendo marcas mundiales en 10.000 (en esta distancia ha sido campeón olímpico en dos ocasiones y campeón del mundo en cuatro) y 5.000 metros en pista.


Y es en esos años cuando nos encontramos a nuestro atleta africano con una eterna sonrisa en su boca, que pierde cuando corre y recupera milagrosamente cuando llega a meta, habla con la prensa o saluda a sus rivales. Así que todos admiramos a Haile. Nadie acumulaba más oros en el fondo que él. Pero en 2003, en el campeonato del mundo de París, parecía habérsele detenido el tiempo ante la presencia de otro compatriota suyo: un mocoso apellidado Bekele.

Recuerdo que todos los que asistimos a esa carrera por televisión presentimos que había llegado el final de ciclo de Haile, así que lo fuimos despidiendo de la pista con la imaginación, con reverencias sinceras al grito de ¡maestro, maestro! Al año siguiente en Atenas se rompió su talón de Aquiles izquierdo. Ya se estaba alejando de las pistas y comenzaba a prepararse para Maratón, prueba para la que muchos interiormente le reclamábamos.
Se operó en Finlandia. Tuve ocasión de ver en un gráfico que publicó un periódico deportivo el proceso de ruptura y sellado de su talón de Aqui
les, ese que tantos años había sufrido y posibilitado que corriera y ganara todo lo que corrió y todo lo que ganó. Pero, ya se sabe, ningún cirujano mejor que la propia naturaleza y con cierta nostalgia pensamos: ya no volverá a ser el gran Gebrselassie; además nos encontrábamos ante un tipo joven para el atletismo de fondo, con apenas 31 años, muchos sueños echados por tierras, muchos triunfos, y por tanto mucho dinero, el que probablemente necesitara alguien humilde de uno de los países más humildes de la tierra. Una pena. Además, no se trata ni por asomo de las ganancias mareantes a las que nos tienen acostumbrados elementos más mediáticos como futbolistas de cuyos nombres no quiero acordarme. Pero operó ese gran cirujano finés y operó el milagro; y surgido de las cenizas como el ave Fénix, nuestro gran Haile comenzó a coquetear con la distancia de Filípides. Al año de la operación estableció la mejor marca mundial en maratón de 2005 – 2:06:20-, en el Maratón de Ámsterdam. Al poco batió la plusmarca de Media Maratón en Phoenix, con un tiempo imposible de 58 minutos y 55 segundos, al tiempo que destronó a su amigo Paul Tergat de la plusmarca de 20 kms.

Hace unos meses, en Berlín, en septiembre de 2007 Geb batió la marca mundial de Maratón, que también poseía Tergat, dejándola en 2:04:26 y según confesó él mismo, la noche anterior en la habitación del hotel contempló un Berlín lluvioso, triste y brumoso y no pudo evitar preguntarse – como hacen los humanos, como hacen los seres dotados de fibra sensible -¿Qué hago yo aquí? , y desde entonces no he podido parar de dar vueltas a la cabeza sobre la mezcla de grandeza y humanidad de este hombre. Y sobre esa frase.

A los pocos días Haile se encontraba de nuevo corriendo por los montículos cercanos a su casa de Addis Abbeba, alejado de toda posición mediática privilegiada, haciendo lo que siempre a anhelado hacer: correr, correr sin más, igual que lo hacía cuando tenía que recorrer la distancia de 10 kilómetros que separaban su casa del colegio. Corría apretujando contra su pequeño pecho sus cuadernos y libros y de ahí su costumbre de correr con el brazo derecho semiplegado sobre el pecho. Pero al día siguiente de batir el record de Maratón en Berlín, por primera vez no corrió por la mañana: “sentía las piernas cansadas”, dijo. Salió a correr por la tarde.


Contemplar el correr de Haile es para quienes corremos habitualmente algo más que un espectáculo visual de elegancia y potencia. Es la respuesta que resuelve todos los enigmas atávicos que unen a la naturaleza con el hombre.

ANTONIO JESUS FLORENS