viernes, 15 de junio de 2007

RUTA PANTANO CUBILLAS

Tal y como ayer escribía hoy hemos estrenado una ruta muy cercana a nuestros domicilios y lugar popular donde los haya, ya que tradicionalmente ha sido -y es- un lugar de esparcimiento dominical de vecinos de pueblos colindantes como Albolote, Atarfe, Albolote, Maracena e incluso de Granada, pero que hasta ahora no habíamos corrido por allí. Y ha resultado muy interesante, si bien algo dura ya que es la típica ruta rompepiernas con bastantes trozos picados y alguna que otra rampa de cierta importancia. Por lo demás, se trata de un lugar rebosante de naturaleza pura, totalmente oxigenado y con apenas tráfico en la casi totalidad de su recorrido, a excepción hecha de la antigua carretera de Madrid, que debido a la construcción de la cercana Autovía A-44 (también denominada de Sierra Nevada, en su trazo granadino), es testimonial, el imprescindible para acceder a las distintas urbanizaciones por allí existentes y el acceso al cruce de algún pueblo por allí cercano, como es el caso de Colomera o Calicasas.
La ruta que hemos hecho Paco y yo tiene 10.300 metros y arranca desde el restaurante Romero, situado en el mismo umbral del Pantano. Desde allí hay que trotar por la antigua carretera, alrededor de tres kilómetros hasta buscar el desvío a la Estación de Calicasas, que cuenta con un terreno algo picado (si bien Paco considera que bastante picado). Esta carretera local bien asfaltada corre paralela a la vía del tren que une Granada con Madrid a la izquierda, mientras que a la derecha se abren los inmensos pinares que son la antesala del Pantano de Cubillas, que en esta tarde nublada presentaba el aspecto de una bandeja plateada. La ruta va buscando una circunferencia bastante imperfecta durante algunos kilómetros, para separarse posteriormente algunos kilómetros más, buscando la salida de la carretera local de la Estación de Calicasas hasta la carretera nacional de nuevo que tradicionalmente unía Granada con Jaén y Madrid. Es en esa zona anterior a llegar la carretera nacional cuando se encuentra la principal dificultad: una subida, de aproximadamente 900 o 1000 metros, algo más que picada que hay que subir con bastante discreción y salvaguarda ya que hace mella en los pulmones y las piernas del corredor.
La entrada a la carretera es suave durante dos kilómetros (hasta llegar de nuevo al restaurante Romero). Estos dos kilómetros son rápidos aprovechando la ligera bajada hasta llegar de nuevo al mismo borde del pantano, si bien esta carretera - como se puede ver en la imagen de GeogleEarth-, busca la circunferencia imprecisa del Pantano del Cubillas. En total casi 10 kilómetros y medio muy estimulantes y, repito, exhuberantes de naturaleza que, tal y como comentaba Paco, pareciera que estuviéramos corriendo en las inmediaciones de un lago canadiense. Por tanto una ruta muy recomendable que habrá que repetir e integrar como ruta habitual, incluso en dirección contraria. (Para ver mejor la ruta cliquear en la fotografía)

5 comentarios:

Anónimo dijo...

compae lo mismo de vivo que te veo corriendo eres escribiendo, magnifico tu comentario, recomienda esta ruta a tus seguidores, yo particularmente quede prendao de tanta naturaleza.

José Antonio Flores Vera dijo...

Amigo Paco: Creo que mereció la pena ese sufrimiento del que hablabas en la rampa. El sitio merece la pena y debemos de comenzar a dominarlo como alternativa rompepiernas a la Vega. El próximo día lo hacemos al reves. Hablamos luego.

Mario dijo...

si es bonita esa carreterilla que va por rodeando el pantano cubillas, lástima que esté un poco descuidada. La apuntaremos. nos vemos en durcal

Anónimo dijo...

Suerte para la prueba del valle de lecrin( Durcal).
Confío en hacer en Septiembre la ruta que has marcado.
Saludos

José Antonio Flores Vera dijo...

Incluso antes, Ángel Luis, ánimo. Hoy en Dúrcal, comenté con gente del club lo de tu lesión. Algunos no la conocían. Saludos.