miércoles, 9 de mayo de 2007

TIEMPO DE RELAJACIÓN, TIEMPO DE LITERATURA


Son momentos de calma y relajación. Trás el desgaste que produce un maratón es aconsejable siempre realizar una parada en la rutina de los entrenamientos. Las salidas más escasas y las distancias recorridas en esas escasas salidas cortas. Hay que dar tiempo para que regeneren los músculos y tiempo para que vuelvan a aflorar las endorfinas, que en mi caso ya están haciéndose notar con fuerza. Planificado estaba no salir a correr de lunes a jueves, pero será un placer poder hacerlo el viernes, el sábado y el domingo. Y nada mejor que optar por rutas motivadoras, por la Vega o por la ruta de Caparacena. Son muchas las ganas de colocarse el atuendo de corredor y devorar los kilómetros necesarios para que las sensaciones sean excelentes. Correr por correr, sin otras contemplaciones de mayor calado. Y así será durante todo el mes de mayo, para que con la entrada de junio vuelva a cumplir nuevos retos y entrenamientos más intensos, buscando el afinamiento para las duros retos que se presentarán desde el verano en adelante.
Mientras tanto, aprovecharé estos momentos de sosiego para introduciros un artículo dedicado a Pinos Puente que fue publicado en Ideal Granada, mientras nos esforzábamos por subir las "paredes" del Barrio de Monachil. Un artículo con tintes literarios que aborda la reflexión que un buen día me ofrecieron dos cuadros. Uno de ellos, un dibujo antiguo de un Pinos Puente en ciernes, pero ya reconocible; y otro una fotografía muy similar a la que acompaña a este post, del puente califal, de origen romano y visigodo.
Os enlazo la página del periódico, en su versión digital, (sé que algunos ya lo leistéis en su versión impresa), así como la reprodución del artículo, por si fallara el enlace.

http://www.ideal.es/granada/prensa/20070506/tribuna_granada/cuadros-momentos-pinos-puente_20070506.html

TRIBUNA

Dos cuadros, dos momentos de Pinos Puente

JOSÉ ANTONIO FLORES VERA/


TENGO en una pared de mi casa dos cuadros. Uno es un dibujo de Pinos Puente tal y como -parece ser- era en el siglo XVI o albores del XVII. El segundo es una fotografía antigua del puente, romano o visigodo o árabe. En fin, a lo mejor un poco de todo. Este cuadro está fotomontado en un marco elaborado en taracea granadina y me lo regaló mi buen amigo -el amigo de todos- Manolo Martín Lafuente, cronista de la villa. Ambos cuadros presiden la habitación y me observan y yo los observo siempre que permanezco en la estancia. El primero de los cuadros es un dibujo que se cree realizado por un famoso viajero italiano de nombre Navaggiero del siglo XVI -o tal vez XVII-, y en él se puede contemplar la iglesia y su torre, acompañadas ambas por un breve racimo de edificaciones de lo que tal vez debió de ser el germen de la población. A la derecha del dibujo, en un primer plano, se observa humilde, pero al mismo tiempo soberbio, el puente, el puente de Pinos, con sus tres herraduras características y una especie de torre del homenaje de rasgos árabes. Su figura es muy distinta al actual, si bien la base, zapata y herraduras son las mismas. También es posible deducir -apoyándonos más en lo que conocemos que en lo que vemos en el dibujo- el río Cubillas que ya se anuncia a tenor de la aparente humedad de alrededor y la vegetación abundante que presiden ambas orillas. Al fondo se divisa lo que podría ser el conocido hoy como Cerro Navero, con un inmueble corto de alzada presidiéndolo y de silueta similar a un pequeño castillo (no olvidemos lo sugestivo del nombre del barrio donde se ubica: El Castillejo), hoy inexistente. Ahora bien, si contemplamos la ubicación de dicho cerro en el dibujo, éste se nos escora un poco a la derecha si lo comparamos con la perspectiva original -si lo consideramos en relación con la posición de la torre de la iglesia, que aparece mimética a la que hoy conocemos-, más situado a la izquierda. Más a la derecha es posible contemplar la ladera que en situación ascendente desaparece del dibujo, ofreciéndonos los datos certeros del hoy denominado por todos el Piorno. En la otra posición, es decir en la parte izquierda del dibujo, se contempla una especie de cortijo, no muy distante de la iglesia y su racimo de casas que bien podría ser la prolongación de lo que hoy denominamos calle Real, a la altura aproximada de lo que denominamos 'la frontera'. Reconozco que siempre he intentado mentalmente situar la posición exacta desde donde se hizo el dibujo, apoyándome en los lugares de la actualidad, sin lograrlo, aunque mi deducción me indica que podría haber sido dibujado en los alrededores de la parte de la Vega, enfrente de lo que fue la antigua plaza de abastos de Pinos -hoy sede del Instituto Nacional de Empleo, Correos y oficinas municipales-, más en dirección hacia la curva que hace la carretera, que bien podría haber sido un camino de viajeros en su día. Muchas veces, cuando la jornada se acaba y la mente se relaja, me sorprendo mirando el dibujo, como queriendo penetrar en él ahondándome en otra época de Pinos Puente para descubrir los lugares y edificios que conociéndolos hoy, antes no existían; jugando con la imaginación para ubicar en el ahora lugares inexistentes antaño. El segundo cuadro que preside la estancia es una fotografía de hace algunos años del Puente de Pinos, el cual en su dimensión extendida aparece desprovisto de cal alguna en su alzado alto, ya de aspecto muy actualizado. Sin embargo, es distinto en su tonalidad a la que hoy acostumbramos ver a diario, pero es su perfil característico, provisto de sus tres herraduras, pero con una torre muy distinta a la que pudimos contemplar en el dibujo anterior. En la parte inferior de la fotografía se puede ver nítidamente su imagen perfectamente reflejada en unas aguas completamente cristalinas y que rezuman profundidad y sosiego. No sé exactamente cuándo se tomó la foto, pero sí es posible observar la coquetería con que el Puente se mira en el agua, algo que hoy es casi impensable. Son dos momentos de Pinos Puente que asoman a la imaginación. Un momento, dibujado, imaginado por un forastero que quizá estaba de paso. El otro, más familiar pero extraño a pesar de su breve lejanía en el tiempo. Dos momentos que se suman a los momentos diarios de contemplación del pueblo que nos patrocinó en nuestro nacimiento. Existirá un futuro mejor o peor, pero seguirán estando ahí las piedras imperturbables al paso del tiempo. Seguirá estando ahí su ubicación física a mitad de camino entre la Vega y los Montes Orientales y seguirá estando en nuestra memoria del sentimiento. Pudo haber acogido y, probablemente, acogerá en su seno visitas históricas e ilustres, aunque permanecerá con su idiosincrasia propia a nuestros ojos. Es Pinos Puente, una población con la cual hay que reconciliarse a diario.


8 comentarios:

Anónimo dijo...

He leído varios de tus artículos publicados en Ideal, y me quedo con los que tienen tinte litarario como este último. Enhorabuena y sigue escribiendo así de bien. Saludos

Paco Montoro dijo...

Este mes tiene que ser así, sin agobios, sin planes y darle a nuestras sufridas piernas ese descanso que se merecen, pues si no se la damos seguro que tarde o temprano nos lesionaremos, y todo se vuelve cuesta arriba.
Bueno este artículo del Ideal, espero que siempre que escribas uno, nos de el enlace. Saludos.

Mario dijo...

PINOS PUENTE... una cosa me da vueltas, seremos los dos primeros pineros en hacer una maratón??? la verdad es que yo no he visto a nadie por Pinos correr nunca más de lo necesario y saludable, me los he encontrado dando pedales por donde no había nadie, o a tres mil metros llegando a pie a lo alto de un cerro, pero corriendo??? creo que eres el primero de la edad contemporanea que me encuentro en esto de correr.

José Antonio Flores Vera dijo...

Amigo anónimo: También tengo especial querencia por los artículos más literarios, si bien no siempre salen. Gracias por leerme.

Paco: Pero pronto debemos de ponernos las pilas de nuevo. En mi caso, no quiero dejar más allá del veintialgo de mayo para comenzar a entrenar más duro. En el proximo pos hablaré de las pruebas que tengo planeadas de aquí a final de año. Cuéntanos tus proyectos. A veces se me olvida poner el enlace de algún artículo nuevo, pero siempre procuro enlazarlos.Saludos y gracias por leer el artículo.

Mario: Paisano, qué razón llevas. Teniendo como tenemos esas rutas, y esos circuitos tan naturales, resulta increible que la gente no lo aproveche. Es lo que hablaba el otro día con un amigo del pueblo que vive en Úbeda, donde no existen este tipo de circuitos, o al menos tan a mano. Curiosamente, el otro día hablaba con Emilio que es el actual alcalde y amigo de muchos años, acerca de que íbamos a correr dos pineros en el maratón de Madrid y que probablemente fuéramos los primeros en hacerlo. Así que espero que también seamos los primeros en correr una segunda. Por cierto, si organizamos una tirada por la Vega de Pinos con los compañeros del club espero que te vengas. Probablemente sería un domingo por la mañana. Si vienes a una carrera del circuito lo hablamos.

Mario dijo...

Habrá que ir a esa ruta, y al circuito tengo que engancharme ya a la próxima, creo que Huetor Tajar, tres carreras he dejado pasar ya, y sino me equivoco ya no puedo dejar pasar ninguna mas

Paco Montoro dijo...

Me gustaría retomar mis dos maratones anuales, uno en primavera y otro en otoño. Así pues en Octubre quiero estar en la salida de Ciudad Real o en Noviembre en San Sebastian. Si se planifica con sus descansos y en condiciones se hace muy bien, Aunque todos me lo dicen que entrenar en verano es una locura, yo me lo paso muy bien.
Ahora me gustaría hacer Orgiva (que nunca la he hecho) o Marbella, una media nocturna. Lo peor es que las dos coinciden el mismo fin de semana. Tambien está la Media de Motril, esa si que la corro, y las que pueda de vuestra Diputacion, ya que son muy interesante y aquí las carreras escasean por estas fechas.
En Junio hay otra media en Gaucín, son muchas las carreras que tenemos en estos meses venidero, así que como tu bien dices, hay que ponerse las pilas. Saludos.

José Antonio Flores Vera dijo...

Paco: nos quedan unos meses apasionantes. Es cierto que el Circuito de Granada nos ofrece muchas posibilidades, incluso a quienes vivir en provincias limítrofes. Es variopinto. El año pasado corrí por vez primera la media de Motril y comprobé el miedo reverencial que suscita esta prueba, no por cuestas evidentemente, sino por la humedad. Recuerdo que fuí todo el camino como "asustado" y a ritmo conservador, pero es muy bonita y se portan de maravilla en organización y regalos. De hecho, es de las pocos en las que el Concejal de Deportes - que es amigo mío -, también la corre y eso siempre pone a la carrera en un lugar destacado. Espero que te animes a venir a Orgiva, aunque tambien suena interesante esa media nocturna de Marbella (por cierto, ciudad necesitada de gente sana, además de la mucha que hay por aquellos lares)

Anónimo dijo...

José, este sábado no podré estar en la prueba de Huetor por acudir a una Comunión, te deseo una rápida carrera.
Confío en vernos en Orgiva, prueba dura como señalas pero la segunda mitad es de bajada (Lanjarón a Orgiva) y eso se agradece y mucho. El resto de pruebas espero también hacerlas.
Salu2
Fdo: Angel Luis