Momentos hay en la vida de cualquier persona que se pueden tornar extraordinarios. Si entendemos por éstos todos las acciones que pudieran, en principio, salirse de lo ordinario.
Extraordinario en nuestro mundo de corredores puede ser correr un maratón, sin ir más lejos. Todo corredor lo anhela, pero no todo corredor está dispuesto a dar ese paso.
UNA ESPECTÁCULAR IMAGEN DEL MARATÓN DE NEW YORK
Y hago esta escueta introducción porque conozco de un corredor que no corre desde hace diez años -excepto alguna contada escaramuza-, que introducirá en su vida un reto extraordinario. No correrá un maratón, no. Correrá ni más ni menos que el Maratón de New York, la meca los maratones, la catedral de los corredores, el santuario del runner. Sun nombre, ya lo dice el título de esta entrada: Manuel Pedreira.
Manuel Pedreira, Manolo cuando comenta en este blog, es periodista de Ideal. Y es corredor. Lo sé, aunque no le conozco personalmente. Sé que es corredor porque lee este blog y sé que es corredor porque aunque no corra desde hace tiempo por mor de una lesión, siempre está corriendo en su mente, como me ocurre a mí cuando me lesiono, como supongo le ocurrirá a mucha gente que no corre porque no puede. Pero eso no significa que no sean, que no seamos, que Manolo no sea, corredor. Se es corredor o no se es. Punto.
A Manuel Pedreira -que escribe una columna en Ideal los martes también y que hace una semana coincidió la mía con la suya en el mismo número de Ideal-, se le ha presentado una ocasión estupenda: correr el próximo maratón de Nueva York. Por unas curiosas circunstancias y casualidades - que tuvo a bien explicarme por correo electrónico y que nos explicará él detalladamente, supongo-, tiene la inscripción asegurada en el maratón de la ciudad de los rascacielos. Y no se va a echar para atrás. Tiene que entrenar. Y mucho. De manera que como lector que es de este blog, a la par que amigo de Jesús Lens, Alter Ego de quien esto escribe, me comentó que le gustaría sobremanera comunicar en este espacio humilde su próxima hazaña. Porque quiere transmitírselo a la comunidad de corredores que leen este blog, porque quiere que el grupo de Las Verdes conozcan y, si es posible, apoyen su gesta. Y, por supuesto, la vamos a apoyar. Es más, le vamos a invitar cuando el quiera a que entrene con nosotros.
En breve, Manolo, creará un blog propio e introducirá a través de las páginas de Ideal un seguimiento, en comunión con los lectores, de su progresión en el entrenamiento. Y ni que decir tiene va a necesitar mucho ánimo. El mío lo tiene y supongo que también de todo aquel que lea este blog. No olvidemos que Manolo ya había corrido algún maratón, pero de eso hace ya diez años, a pesar de que goza aún de mucha juventud. Y como todos sabemos, el correr es siempre menor de edad y olvidadizo.
Por tanto, vamos a seguir su entrenamiento, sus progresos, sus inquietudes, sus dudas. Y quién sabe, igual algún día se hace Verde.
UNA ESPECTÁCULAR IMAGEN DEL MARATÓN DE NEW YORK
Y hago esta escueta introducción porque conozco de un corredor que no corre desde hace diez años -excepto alguna contada escaramuza-, que introducirá en su vida un reto extraordinario. No correrá un maratón, no. Correrá ni más ni menos que el Maratón de New York, la meca los maratones, la catedral de los corredores, el santuario del runner. Sun nombre, ya lo dice el título de esta entrada: Manuel Pedreira.
Manuel Pedreira, Manolo cuando comenta en este blog, es periodista de Ideal. Y es corredor. Lo sé, aunque no le conozco personalmente. Sé que es corredor porque lee este blog y sé que es corredor porque aunque no corra desde hace tiempo por mor de una lesión, siempre está corriendo en su mente, como me ocurre a mí cuando me lesiono, como supongo le ocurrirá a mucha gente que no corre porque no puede. Pero eso no significa que no sean, que no seamos, que Manolo no sea, corredor. Se es corredor o no se es. Punto.
A Manuel Pedreira -que escribe una columna en Ideal los martes también y que hace una semana coincidió la mía con la suya en el mismo número de Ideal-, se le ha presentado una ocasión estupenda: correr el próximo maratón de Nueva York. Por unas curiosas circunstancias y casualidades - que tuvo a bien explicarme por correo electrónico y que nos explicará él detalladamente, supongo-, tiene la inscripción asegurada en el maratón de la ciudad de los rascacielos. Y no se va a echar para atrás. Tiene que entrenar. Y mucho. De manera que como lector que es de este blog, a la par que amigo de Jesús Lens, Alter Ego de quien esto escribe, me comentó que le gustaría sobremanera comunicar en este espacio humilde su próxima hazaña. Porque quiere transmitírselo a la comunidad de corredores que leen este blog, porque quiere que el grupo de Las Verdes conozcan y, si es posible, apoyen su gesta. Y, por supuesto, la vamos a apoyar. Es más, le vamos a invitar cuando el quiera a que entrene con nosotros.
En breve, Manolo, creará un blog propio e introducirá a través de las páginas de Ideal un seguimiento, en comunión con los lectores, de su progresión en el entrenamiento. Y ni que decir tiene va a necesitar mucho ánimo. El mío lo tiene y supongo que también de todo aquel que lea este blog. No olvidemos que Manolo ya había corrido algún maratón, pero de eso hace ya diez años, a pesar de que goza aún de mucha juventud. Y como todos sabemos, el correr es siempre menor de edad y olvidadizo.
Por tanto, vamos a seguir su entrenamiento, sus progresos, sus inquietudes, sus dudas. Y quién sabe, igual algún día se hace Verde.
21 comentarios:
Manolo ya ha corrido maratones. Y en unos tiempos excelentes. Desde luego, cuando lo ves en persona, ni te puedes imaginar que lleve tanto tiempo parado, de fino que está. Aunque parado no es la expresión oportuna. Cuando las lesiones le alejaron del asfalto, su mentalidad deportiva lo arrojó a las piscinas, en las que nada como una anguila.
de hecho, hay quién dice que, una vez termine la Maratón de Nueva York, no se vendrá en avión de vuelta a España, sino que atravesará el Atlántico, dejando chicos los desafíos de David Meca.
¡Mucho ánimo, compañero!
Quién le iba a decir a Manolo que las enseñanzas de nuestro querido Johnathan le iban a venir tan bien para comerse, a bocados, la Gran Manzana...
Por cierto, que hoy es martes y la columna de Manolo en IDEAL no tiene desperdicio. De las que habría que enmarcar.
Excelente artículo, sí señor - está enlazado cuando se pincha el nombre del autor-, que me ha evocado muchas cosas, principalmente cuando hacíamos esos auténticos "viajes" a la cost apara jugar con equipos motrileños o sexitanos. Para nosotros, los infantiles o juveniles del Pinos Puente, eran viajes auténticos, acostumbrados siempre a jugar en pueblos más o menos cercanos. Y es que así se percibían los desplazamientos a Motril, con mareos incluídos en los caracolillos de Vélez que cita Manolo. Todos esos elementos del recuerdo deberían de seguir intactos para visita y regocijo, aunque hay que decirlo, es inevitable que exista esta autovía. El progreso.
Alter, me imagino que este artículo a tí te habrá evocado épocas doradas ya que tu relación con la costa granadina es muy estrecha.
Cierto. Un Minimorris echando humo y la Guardia Civil de Tráfico ayudándonos en la carretera y un Seat 131 que, el pobre, nunca podía ir a más de 60, que mi padre era "prudente" en la carretera.
Es verdad. Con 11 de vida ya estaba en Carchuna. ¡Ay! Ahora apenas bajo. Y pienso si no estaremos equivocando los conceptos...
Gracias José Antonio, lo has clavado. Has explicado de qué va la historia pero, además, con la habilidad de contar sin contar del todo. No me hubiese importado en absoluto que lo hubieses hecho, pero así me has dejado más 'material' para las primeras piezas de ese blog que verá la luz el próximo domingo, si dios y el demonio quieren.
A Jesús, gracias por todo también. Por toda tu impagable e imprescindible ayuda y por los elogios, exagerados. Es cierto que corrí maratones pero hace tanto tiempo... (ya entraré en detalles en el blog) Lo de fino... (mi cara engaña, la barriga no, aunque es cierto que me he afinado en el último mes y medio). Y en cuanto a la natación, digamos que nado con 'tenacidad' y soy un habitual de las travesías a nado veraniegas de la provincia y limítrofes... nada comparables a un maratón o ni siquiera a una media.
No obstante, intentaré lo del maratón de NYC. A ello me dedico en cuerpo y alma.
En cuanto al artículo de hoy, muchas gracias por las alabanzas y por captar el tono irónico-nostálgico. Se ha escrito tanto sobre el tema que resulta muy difícil hincarle el diente sin aburrir ni repetirse. Es tan sangrante lo de la autovía que uno ya desvaría. Es como esa escayola que tanto te ha jodido durante cuatro semanas pero que te da un nosequé cuando te la quitan. Como el lienzo que cubría el Suizo durante su restauración, que ya formaba parte del paisaje urbano, etc... hay muchos ejemplos. Nuestros políticos nos van a llevar a la esquizofrenia.
Hala, seguimos en contacto.
O sea, Manolo, que estás pensando en volver en avión en vez de a nado... ;-)
Sí señor. El de la autovía es un tema que aburre, algo que, creo, han hecho a propósito. Yo no me he atrevido a meterle mano y por eso te reconozco el valor y el talento de hacerlo desde esa perspectiva irónica, tierna, pero reivindicativa.
Y es que la Cabra tira para el Monte.
Tú lo has dicho Manolo. Como buen periodista has captado a la perfección esa introducción por mí hecha, dejando el caramelo a punto de entrar en la boca, casi saboreándolo para que tú lo cuentes mucho mejor,como voz más autorizada, dejando fresco e intacto el material que desgranarás a lo largo de estos meses en tu blog y en Ideal. Ya sabes que tienes a tu disposición este blog, desde el que seguiremos tu trayectoria con verdadero interés.
Tú artículo ha tenido la virtud de tocar la fibra sensible del granadino y de su relación amor-odio hacia ese trayecto: necesitamos la autovía, pero al mismo tiempo echamos de menos esa carretera tortuosa, en la que era posible parar para enfríar el motor, al estilo de lo que comenta Jesús, escuchando la chicharra bajo el el fuego de agosto y justo al lado de una chumbera, alegrándonos cuando pensamos que en poco tiempo estaremos con los pies metidos en agua fresquita. Es algo que no viví demasiado -no tanto como vosotros- cuando niño, pero lo recuerdo como evocador, incluso cuando he ido en mi coche propio, además -como decía antes- cuando bajábamos a la Costa a jugar con los buenos equipo de esta parte de la provincia.
Aunque no conozco a Manolo, quiero darle ánimos desde aquí para que afronte ese reto. El tiempo que consiga no es lo importante. Sobre todo lo que debe hacer es disfrutar de la ciudad y de la carrera. Saludos y suerte!!!
Manolo, mucho ánimo, aunque creo que ese maratón se debe correr casi sin esfuerzo al tener la ciudad, por antonomasia, rodeándote. Mucha suerte, por cierto la envidia me corroe.
Muchas gracias Gregorio, intentaré disfrutar de la ciudad y de la carrera porque, como tú dices, el tiempo es lo de menos (creo que dispongo de siete u ocho horas, je,je).
Gracias también a Antonio. Me imagino que sin esfuerzo será al principio porque me temo que pasado el kilómetro 33 o así iré tan hecho polvo que me dará igual estar en Manhattan o en Calicasas. Espero no perder nunca de referencia que estaré transitando por la capital del mundo. No lo puedo prometer, je,je.
Manolo, mucho ánimo. La van a correr 2 amigos míos también. Yo estoy en lista de espera para un dorsal, a ver si tengo suerte. Seguiremos tu blog. Un saludo
Gracias Víctor, si me dices sus nombres los buscaré a gritos en la línea de salida, je,je.
Otra cosa relacionada, aunque sea de mi trabajo. Mañana al mediodía, si todo va bien, entrevistaré a Chema Martínez, que está entrenando en el CAR de Sierra Nevada. Me imagino que sabéis quién es, maratoniano que correrá en Pekín. Hacía 10.000 y cross y se pasó al maratón hace pocos años. Ganó el Mapoma en abril.
En fin, admito sugerencias para las preguntas, je,je,je.
Un saludo a todos.
Manolo, ¡ Que entre en este blog ! jeje.
Chema, es uno de los grandes. Y además -tu tendrás el privilegio de comprobarlo- una persona excelente. Me imagino que le pedirás algún truquillo para la preparación de cara a tu próxima Maratón.
Es precisamente uno de los atletas sobre el que quiero escribir un proyecto Florens como ya hice con el gran Haile.
Saludos y buena entrevista, de la que disfrutrás un montón.
Manolo, una pregunta con mala follá ;-)
Teniendo en cuenta las condiciones climáticas y atmosféricas de Pekín, ¿no entrenaría mejor entre los coches de la Gran Vía madrileña que en las altas cumbres de Sierra Nevada?
Otra: ¿Está de acuerdo con los últimos avances científicos según los cuáles, después de entrenar hay que beberse una Verde bien fría? O dos. Incluso tres. Cuatro ya sería abusar, eso sí.
Que disfrutes esa entrevista!!!
Me da rabia no poder hacer un Florens antes de irme. No es por falta de ideas. Es por falta de tiempo.
Pero en agosto nos desquitamos.
Sí, dejaremos pasar las vacaciones, los viajes y retomaremos los Florens a la vuelta, y para final de año recapitulamos, de acuerdo con lo que hablamos.
Hola Compañeros.
Ya está otro entreno mañanero por el Llano, y esta vez con un nuevo integrante, Daniel el aguerrido.
La verdad es que cada día me gustan más estos entrenos mañaneros. Hoy faltaba Mario. La semana que viene quedamos otra vez.
Un abrazo
si al final habrá PELOTÓN mañanero. Ahora las salidas mañaneras las haré por Pinos PUente, asi que paisano compae madruga un día.
Qué envidia paisano ver el amanecer por la Vega. Cuando me recupere no me resisto a trotar una mañana por allí.
¿ Está el puente de Alitaje ya alzado ? ¿ Qué pasará este año con la Romería ?
un buen recorrido para volver a caminar
Desde correr para vivir mejor contará con todo mi apoyo ¡¡suerte!!!
Saludos
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